Proyectos nacionales, estatales y municipales de desarrollo integral es para beneficio de unos cuantos   

• Los proyectos de México y de Veracruz son de todos y todos debemos participar:  

Arquidiócesis de Xalapa. 

Irineo Pérez Melo.- La Arquidiócesis de Xalapa consideró que los proyectos nacionales, estatales y municipales de desarrollo integral no se sostengan en el provecho de unos cuantos, sino en la participación y beneficio de todos los mexicanos, a los que se invitó a participar para tal fin. 

“Los proyectos de México y de Veracruz son de todos y todos debemos participar”, en un ambiente de reconocimiento y de respeto, se indica en el comunicado dominical que emite la Oficina de Comunicación Social de esta asociación religiosa. 

En el documento, signado por el presbítero Juan Beristaín de los Santos, vocero de la Arquidiócesis de Xalapa, hace referencia a la encarnación de Cristo, que indica que cada persona, de cualquier condición, es digna de justicia, paz y bendición.  

“La unidad que evita la división de la sociedad civil la podemos buscar en la dignidad que la encarnación de Cristo nos ha puesto de manifiesto. En Cristo debemos reconocer que existe, sin distingo alguno, una gran dignidad en toda persona por el hecho de existir”, se menciona en el comunicado. 

Además, sostiene que la noticia de Cristo encarnado nos demanda responder a Dios mediante fe comprometida socialmente que actúa por la caridad y promueve la dignidad de toda persona, lo que “nos invita a reconocer, respetar y promover a toda persona para que los proyectos nacionales, estatales y municipales de desarrollo integral no se sostengan en el provecho de unos cuantos, sino en la participación y beneficio de todos. 

“Esta experiencia de que Dios se comunica a sí mismo mediante el don de su Palabra, es lo que nos abre un camino en medio de la obscuridad de tantas problemáticas que nos aquejan a los veracruzanos al inicio de este 2024”, se menciona.  

En ese tenor, se señala por último, se construyen proyectos sin que prevalezca la dignidad de la persona en Cristo.